Génesis 13: 14-15 Después de que Lot se fue, el Señor le dijo a Abram: «Mira lo más lejos que puedas en todas las direcciones: al norte y al sur, al oriente y al occidente. Yo te doy toda esta tierra, tan lejos como alcances a ver, a ti y a tu descendencia como posesión permanente.
¿Alguna vez has cerrado los ojos y te has visualizado en un lugar en particular, ya sea otra casa, un nuevo trabajo, un negocio o quizá de vacaciones?
Quizá te has “visto” haciendo algo diferente y que realmente te apasiona cómo pintar, tocar algún instrumento, o tal vez enseñando. Y tal vez, casi inmediatamente te has dicho -¡Eso es algo imposible!-
Creo que a muchos nos ha pasado, que nos tratamos de “ubicar” y pensamos o nos decimos que eso que estamos imaginando es algo imposible; sin embargo, tenemos al mismo poderoso Dios que habló con Abram y ahora está diciéndonos que nos atrevamos a mirar lo más lejos que podamos, que nos adueñemos de esa visión que de manera constante aparece en nuestra mente porque para Él no hay imposibles, y es que cuando decidimos creerle y caminar hacia esa visión podemos establecer las metas y los objetivos para llegar a ella; claro que a veces es necesario que soltemos de nuestro quehacer diario algunas cosas, sean lazos emocionales o costumbres que nos pueden estar estorbando para avanzar.
Es importante estar atentos y recibir de nuestro Padre la guía, determinación, valentía y ser plenamente conscientes de que al tomar acción confiando Él, nos dará su favor y recursos para conquistar y poseer aquello que hemos visto por fe.
Eugenia Flores.
