CONSTRUYENDO TU HOGAR 3 QUE DIOS FORME PARTE DE TU HOGAR

Que Dios forme parte de tu hogar

Estamos estudiando lo importante que es construir un hogar y no solo tener una casa, sea nuestra o rentada.

Hemos visto que el diseño de acuerdo a como Dios ve las familias es importante, y también vimos que lo primero que debemos hacer es poner fundamentos sólidos.

Ahora vamos a ver algo igualmente importante; invita a Dios que forme parte de tu familia, no lo tengas como un adorno, no lo tengas como cruz roja –que solo te acuerdas de Él cuando hay una emergencia-, no lo tengas como un amuleto de la suerte, no lo tengas como alguien extraño. Hazlo tu Papá, invítalo a formar parte de tu familia, porque eso cambia todo.

Si Dios forma parte de tu familia la vida es diferente. No es lo mismo tener a Dios como un extraño que como parte de la familia. Estará contigo y con tu familia y lo disfrutarás cuando tengas éxito, cuando no, cuando tengas un accidente, o cuando tengas un problema, cuando lleguen los hijos, cuando estés contento y cuando estés triste… pero como parte de tu familia, no como un Dios extraño.

Dios tiene oídos y escucha, tiene boca y habla, por lo cual que sea parte de tu familia es real, tienes un Dios real con el que te comunicas todos los días, porque vive en tu casa.

Con Papá en casa es fácil edificar un hogar. Con Dios en la familia la cuida y la hermosea. No lo dejes para otro día, dile hoy mismo, pídele que entre a tu casa y dale la bienvenida como un miembro de la familia.

Al poco tiempo notarás su presencia. Notarás que tu casa empieza a convertirse en un hogar.

Cuando cuentes anécdotas podrás contar aquellas donde Dios es protagonista de los mejores momentos de la vida, de tu vida, de tu familia. No hay anécdotas mas bonitas y mas impactantes que aquellas donde Dios está involucrado.

Una casa donde Dios habita, es un hogar.