HAZ TU PROPIA HISTORIA

Ayer escuché una conferencia muy buena, dentro de esta plática el exponente dijo que él tenía muchas anécdotas de Dios en su vida y contó algunas de ellas y comentó que invitaba a los presentes a que tuvieran sus propias historias con Dios. La verdad me dejó pensando.

Las mejores anécdotas de mi vida, Dios está involucrado. Directamente involucrado. Lo que me hizo pensar es que no todos tienen anécdotas con Dios. Aún creyentes. No han dado el paso de vivir con Dios, creen en Dios, lo respetan, lo aman, pero no se han involucrado con Él de tal manera de tener historias y anécdotas con Dios.

Dios no es un Dios de muertos es un Dios de vivos, a Él le gusta convivir con los que creen en Él. Le gusta cenar con sus amigos, le gusta divertirse con los suyos, le gusta vivir en medio de Sus hijos.

No dejes a Dios en el terreno de “Dios en el cielo”, llévatelo a casa, llévalo a tu vida. Te vas a sorprender qué tan cerca está de ti, tan cerca que si lo invitas a participar en tu vida, no tendrás una anécdota, tendrás miles de anécdotas.

Es muy muy fácil empezar, es tan simple como considerarlo en todo lo que haces, si vas a comprar una casa… pregúntale qué piensa Él y que te oriente a tomar una buena decisión… y espera… estate atento… abre los ojos… o como me decía me papá de niño, ponte buzo caperuzo… Así de fácil.

Puse el ejemplo de una casa, pero puedes preguntar por cualquier cosa, la idea es empezar un diálogo con Dios. Y lo sorprendente es que Dios no te manda Su respuesta por correo electrónico o por “Facebook”… lo sorprendente es que Él mismo viene a decírtela.

Tus anécdotas con Dios son tus evidencias que verdaderamente crees en Él como un Dios de vivos y como tu Padre. Que tu fe no se limita a creer en Él sino actuar con Él.

No dejes tu fe a medias. Da el paso y relaciónate con Él. Disfruta ver cuántas cosasDios tiene para ti… y no me refiero –exclusivamente- a cosas materiales… me refiero a tantas respuestas que tiene específicamente pensadas para ti.

La mejor manera de que tus hijos empiecen una relación con Dios, es la evidencia de que en tu casa, Dios es parte de tu vida, que Dios es parte de la familia.

Armando Carrasco