CONSTRUYENDO TU HOGAR PARTE 8: DEJA UNA HERENCIA

Dejar una herencia es casi siempre un asunto importante en las familias, preocuparse sanamente por lo que vamos a dejar a nuestros hijos debe ser algo que debemos planear desde el comienzo de nuestro matrimonio y no dejarlo para la última etapa de nuestra vida.

Y recomiendo esto por una simple razón. Las herencias no son única y necesariamente económicas o de bienes. Las herencias que mejor podemos dejar a nuestros hijos son algo mas que cosas físicas.

La principal cosa que debes heredar a tus hijos es una fuerte confianza en Dios. Vivimos tiempos de desesperanza, y si no logras inculcar en tus hijos esa confianza, por mucho dinero que tengan, se sentirán inseguros en lo mas interno de su ser, porque como todos sabemos las cosas mas importantes de la vida no las compra el dinero. Hay un salmo que dice: “…me das más alegría que aquellos que tuvieron abundantes cosechas…” Y eso es precisamente lo que debemos heredarles, que la confianza en Dios sea tan fuerte que sus necesidades básicas no los abrumen, sabiendo en que pueden descansar en su Creador como sustentador de su vida en todos los ámbitos; física, emocional y espiritualmente.

La otra cosa que debes heredarles es una sólida relación con Dios. Tal vez tus hijos aprendan a confiar en Dios, pero no desarrollen una relación personal con Él y se estarán perdiendo de la mayor experiencia de la vida, que es ser hijo de Dios. Esa herencia se da no solo enseñándoles la teoría, ellos deben verte cómo es tu propia relación con Dios. Desde mi punto de vista la relación con Dios se desarrolla con la lectura asidua de la Biblia, la oración consistente y congregarse fielmente en un grupo de estudio bíblico. Esas tres cosas son los pilares de una sana relación con Dios. Esta es la mejor parte de la herencia.

Una de las cosas mas valiosas que puedes heredar son buenos recuerdos. Los recuerdos tienen un poder espiritual y emocional muy fuerte. En momentos difíciles los buenos recuerdos con la familia son un buen consuelo. Además los buenos recuerdos cuando están relacionados con enseñanza sirven para recordar todo lo que quieras enseñarles. Mira, tus hijos se van a olvidar de qué color era el jugete de su cumpleaños, pero nunca van a olvidar cuando jugaste con ellos bajo la lluvia. Pueden olvidar cuánto les dabas de domingo, pero nunca van a olvidar cuando se quitaron los zapatos para sentir el pasto. Es mas la herencia económica que les dejes tal vez se esfume, pero los recuerdo bonitos, nunca.

La otra cosa que te recomiendo es que heredes sabiduría. Si logras crear un canal de comunicación con tus hijos para enseñarles sabiduría, estarás proveyendoles la mejor herramienta práctica para enfrentar la vida. Te recomiendo ámpliamente que bases toda la sabiduría que les vas a enseñar en el libro de Proverbios. Enriquecerá tu vida y la de tus hijos.

Con estas herencias no será necesario que te mueras para ver cómo los frutos de este legado que dejas a tus hijos, se manifiestan desde temprana edad. Y te darás cuenta que esa herencia no solo la disfrutarán tus hijos sino tus nietos también.

El principio de la herencia es esta: No puedes heredar lo que no tienes. Así que debes desarrollar:

  • Una fuerte confianza en Dios
  • Una buena relación con Él,
  • Entrenarte en crear buenos recuerdos y
  • Estudiar y practicar la sabiduría. (te recomiendo que sigas el podcast de Equipos Actúa del libro de Proverbios)

Es bueno dejar un casa o una cuenta en el banco. Pero es mejor dejarles algo mas duradero a nuestros hijos, algo donde sus vidas sean verdaderamente enriquecidas.

Armando Carrasco